¡Joder con los rusos!. Podían haber liquidado al pobre Litvinenko como todo el mundo ( como todo el mundo del hampa, quiero decir); pero no, tenían que hacerse los modernos y le han enchufado polonio, por valor de 30 millones de euros. Ahora, resulta que como el espía era de culo inquieto, hay un montón de aviones comerciales contaminados. O sea, que si alguien va a viajar, que sepa que además de convertirse en sospechoso en cuanto intente volar con el colirio, corre el riesgo de convertirse en mutante (Eso en el mejor de los casos, porque en el peor, cascas).
La culpa de todo la tienen los que se dedican a almacenar polonio a manta, porque ¿se puede saber por qué hay que tener cantidades ingentes de este raro metaloide cuyas aplicaciones se limitan a los dispositivos destinados a la eliminación de carga estática y a los cepillos especiales para eliminar el polvo acumulado en películas fotográficas (wikipedia dixit)?. La civilización podría sobrevivir sin el polonio, y sin embargo ahí está,extendiendo una plaga radioactiva y poniéndonos a todos en peligro de convertirnos en churrascos fosforescentes.
Ahora ya sé como se sentían los pollos de corral cuando escuchaban lo de la gripe aviar.
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